“Hay que reconocer que Chiclana progresa a un buen ritmo”.

Actualidad

“Hay que reconocer que Chiclana progresa a un buen ritmo”.

30 septiembre 2024

Compartir

Nuestro presidente, Antonio Junquera, realiza un análisis sobre el estado actual de la ciudad, días antes de que se celebre la Asamblea General Ordinaria de Socios.

Cuando faltan cuatro días para la celebración de la asamblea general ordinaria de la Asociación de Empresas de Chiclana, su presidente, Antonio Junquera, reflexiona sobre el estado actual de la ciudad y la situación por la que atraviesa el empresariado local.

Antonio Junquera habla del sector turístico, de la necesidad de infraestructuras y equipamientos, de su preocupación por el urbanismo, del grave problema de la economía irregular y del futuro de la ciudad.

Fue reelegido presidente en 2021, en una asamblea electoral celebrada telemáticamente y durante una de las crisis económicas más duras que se recuerdan. ¿Está totalmente recuperado el empresariado local?

Hay que distinguir la reactivación de la recuperación. Es evidente que la actividad ha vuelto a Chiclana y que el movimiento empresarial goza de buena salud, pero hay cifras que señalan que hay sectores que no han retomado aún los resultados de antes de la pandemia. Empresarios nos comentan que existen medidas que se pusieron en marcha en su momento y que ahora están siendo difícil de afrontar. Los Ertes y el pago de los ICOs son dos ejemplos. Pero, también nos está afectando mucho el absentismo, que desde aquella época crece de manera exponencial.

«Cada día en Chiclana mejoramos y eso es gracias a todos los sectores del empresariado”.

Aún así, como digo, hay que reconocer que Chiclana progresa a un buen ritmo. Cada día mejoramos y eso es gracias a todos los sectores del empresariado.

La temporada turística que acaba de finalizar ha sido excepcional, ¿cree que existen áreas susceptibles de mejora? ¿Cuáles son?

Una de las características del perfil de los empresarios es la de la búsqueda de la mejora continua, no conformarse y querer ir a mejor cada día. Aunque tenemos motivos de sobra para ser optimistas, no debemos quedarnos estancados en ninguna posición, por buena que sea.

Necesitamos reflexionar y buscar alternativas para que la actividad hotelera se mantenga activa más tiempo. Insistir en la oferta complementaria que llene los huecos que deja la falta de actividades propias de las estaciones calurosas. El deporte, la cultura y la gastronomía son sectores tractores para esta desestacionalización. En cada uno de ellos contamos con empresas, profesionales, instalaciones y actividades suficientemente atractivas, que nos convierte en polo de atracción para visitantes.

Por otra parte, hay que desterrar la tentación de cargar a este sector con impuestos de manera injustificada. Sería hacernos trampas al solitario.

No podemos permitir que se debata sobre la necesidad de una tasa turística. Sería ir en contra del efecto llamada, que ahora tenemos y promover que los alquileres ilegales se conviertan en lo verdaderamente próspero.

«Hay que desterrar la tentación de cargar al sector turístico con impuestos de manera injustificada».

El problema de la movilidad y del aparcamiento necesita una reflexión. La solución de recaudar por aparcar en las bolsas de aparcamiento que existen no es lo mismo que crear más bolsas para que los trabajadores y los visitantes puedan acceder a la zona.

Nosotros abogamos por ver la ciudad como un todo y proponer soluciones viables, que partan de estudios técnicos contrastados que justifiquen las medidas que se tomen y que conlleven otras de carácter paliativo para quien se vea afectado.

Una de las reclamaciones más recurrentes de la entidad que dirige es la mejora de los accesos a la ciudad. Sin embargo, los proyectos de la Carretera de los Barrancos y la Ronda Oeste siguen paralizados. ¿Cuesta que la voz de Chiclana se deje oír en la Junta de Andalucía?

La movilidad y los accesos a Chiclana, insisto, necesitan una apuesta conjunta de todas las administraciones. Dialogo, consenso y luces largas, más allá de los cuatro años de mandato de cada uno, para que las mejoras se inicien cuanto antes. Cada administración, con sus responsabilidades, pero en modo colaborativo y pensando en la ciudad y no en su periodo electoral.

Es verdad que, en este sentido, deberíamos haber tenido una reunión con el PP local en septiembre, seguro que nos convocan en breve, para que, aprovechando que su líder es parlamentaria andaluza, trasladarle que es necesario que se inicien los estudios, los trámites y la burocracia necesaria para que cuanto antes podamos contar con esas vías. Que se incluyan en los presupuestos andaluces cuanto antes, aún estamos a tiempo para que estén en los de 2025.

«La movilidad y los accesos a Chiclana, insisto, necesitan una apuesta conjunta de todas las administraciones».

No lo pide el ayuntamiento, lo piden las empresas y la ciudadanía. Son cruciales para la movilidad y para el desarrollo empresarial. Que nuestros clientes y nuestros proveedores lleguen cómodamente a nuestros negocios nos haría más atractivos, más competitivos, y eso se traduciría en la creación de empleo en sectores sin estacionalidad ni dientes de sierra en su actividad.

En cuanto al último de estos proyectos, ¿Qué le parece la propuesta del Ayuntamiento de Chiclana sobre la Ronda Oeste?

Nos parece que pone la pelota en el tejado de la Junta de Andalucía. Es una gestión política en la que no vamos a entrar. La música y la letra nos suenan bien. Vemos que dan un paso proactivo, pero no conseguiremos nada si empezamos con la discusión de “antes te tocaba a ti y no lo hiciste”, si “tuviste la oportunidad y la dejaste ir” o si “ahora no quiero esa foto contigo”. Eso no nos lleva a ningún lado.

¿Coincidimos en que es necesario? ¿Sí? Pues, hágase. Esto mismo lo decimos para las otras dos administraciones en otros temas. Nosotros somos apolíticos y no nos casamos con nadie.

También hemos reivindicado la ampliación de la autopista A4 o hemos apoyado la inversión en infraestructura ferroviaria, que son decisiones de ámbito nacional. O hemos instado a la administración local a que acabara con el aparcamiento gestionado por los gorrillas, decisión que tenía que partir de esta.

Nosotros tenemos que pedir, argumentarlo y negociarlo. Y no quitarlo de la agenda de trabajo hasta que no se consiga.

Por otro lado, el Gobierno de España está ejecutando las obras de remodelación del enlace de Tres Caminos y ha anunciado otras en la N-340 ¿están satisfechos con las actuaciones?

El nudo de Tres caminos y sus atascos ha vuelto a ser noticia este verano. Esperemos que haya sido el último en el que protagonice portadas en la prensa. La necesidad de la inversión en la N340 no es discutible, la pregunta es ¿cómo estaríamos de desarrollados empresarialmente si hubiera sido resuelto antes? Eso no lo sabemos.

Centrémonos en que la obra se resuelva rápido, contenga los requerimientos de una infraestructura moderna, que no haya que parchear en unos años porque no cuente con características acordes al tráfico que soporta, a las poblaciones que une y a la actividad industrial a la que ha de servir de apoyo. Si eso se da, estaremos satisfechos.

El Polígono Miralrío es otro de los proyectos abandonados. ¿Considera que sigue siendo necesario?

Para nosotros, Miralrío es crítico para crecer empresarialmente, lo que conlleva creación de empleo, generación de riqueza y propicia la diversificación económica. Permite una presencia más equilibrada de los distintos sectores en la economía chiclanera.

La dotación de nuevo suelo industrial, con servicios acordes a la actualidad, con dotación de suministros suficiente, que se diseñe para poder ir creciendo y que esté bien comunicado, para nosotros, es imprescindible y eso se llama Miralrío.

«Miralrío es crítico para crecer empresarialmente, lo que conlleva creación de empleo, generación de riqueza y propicia la diversificación económica».

Este espacio permitiría localizar allí industrias que se encuentran en los actuales polígonos y que no están pudiendo desarrollar todo su potencial porque el suelo en el que se ubican no está dotado o no les da el servicio que necesitan. Permitiría, además, que llegaran grandes empresas tractoras que arrastraran empleo indirecto y un tejido auxiliar de pymes de apoyo. Para nosotros, es la clave. Pero, eso sí, de forma paralela, hemos de trabajar para modernizar el suelo industrial actual, dotarlo de conexiones, de suministro energético, de ancho de calzada, de espacios para descargas, de bolsas de aparcamiento y de seguridad. Tenemos que adaptarlo a la sostenibilidad, actualizarlo al siglo XXI, a un perfil de empresas distinto del que existía cuando se planificó.

Usted también ha insistido mucho en la urgencia de contar con un plan urbanístico para el desarrollo económico del municipio, ¿Cómo ve el proceso? ¿Es optimista al respecto?

Estamos preocupados. Hemos iniciado un trabajo meticuloso de análisis del avance del PGOM. La comisión de movilidad y urbanismo de AE Chiclana lleva dos meses trabajando, sacando conclusiones, viendo áreas de mejora, riesgos de algunos planteamientos y la viabilidad técnica del mismo. Por el momento, las conclusiones que vamos obteniendo nos indican que hay que repensar algunos asuntos que se han planteado, pero quisiera que el trabajo se finalizara antes de dar una opinión al respecto de lo redactado.

Desde luego, por lealtad institucional, quien primero conocerá nuestro trabajo será la administración local, para que lo comparta con el equipo redactor, que es el verdadero responsable del documento de avance.

En cuanto al urbanismo en sí, también estoy preocupado. Estamos asistiendo a un repunte muy significativo de la construcción irregular, de la venta proindiviso, de la instalación de casas de madera efímeras, donde no debería de haberlas y eso merma la calidad del destino, afecta a nuestro medio ambiente, a la calidad de los acuíferos. Hay más construcción que nunca y mucha de ella sin pagar impuestos ni dar de alta a los trabajadores.

«Hay más construcción que nunca y mucha de ella sin pagar impuestos ni dar de alta a los trabajadores”.

Esto hay que erradicarlo tajantemente. Urbanismo tiene que acortar sus tiempos de reacción, multiplicar sus actuaciones y proponer correctivos que eviten que el diseminado tienda al infinito.

El tejido empresarial de la ciudad está formado fundamentalmente por pequeñas firmas. ¿Qué necesitan?

Es sencillo: cada vez que se tome una decisión que pueda afectar a la economía que se piense antes cómo afecta a las empresas. Debemos ser los primeros de la lista y no los que tengamos que improvisar para conformarnos con lo que otros deciden para nosotros.

La lista de peticiones sería infinita. En este sentido, apuntar que CEC acaba de presentar un cortometraje sobre el impacto de la economía irregular.

«Debemos ser los primeros de la lista y no los que tengamos que improvisar para conformarnos con lo que otros deciden para nosotros».

En Chiclana, hay quien arregla coches de manera fraudulenta, poniendo en riesgo la seguridad vial, hay locales de celebraciones del que no se podría salir en caso de incendio y con cocinas que no aprobarían el más básico examen de un veterinario público. Hemos detectado guarderías infantiles que no cumplen con la normativa vigente y que, por lo tanto, ponen en riesgo la seguridad y la enseñanza de lo más preciado, nuestros hijos.

Como eso, podría mencionar a todos los sectores. Pero, además, el impacto no es solo económico en las cuentas de las empresas legales, el impacto va más allá. Afecta al medio ambiente, a los servicios públicos, al bienestar animal.

Por otra parte, está el problema de la mano de obra cualificada. Todas las empresas están en modo ‘reclutar trabajadores capacitados’. pero no los encontramos. Tenemos que actualizar la formación que se imparte y acercarla a los perfiles profesionales que se demandan.

«Todas las empresas están en modo ‘reclutar trabajadores capacitados’, pero no los encontramos».

Me temo que la imposición de la formación dual que se está haciendo va a conllevar muchos problemas. Hay 20.000 alumnos a los que hay que buscar empresas que los formen, hay que darlos de alta, tenemos que ser tutores. No lo veo claro. Además, debemos trabajar para convencer a la población joven de que hay que trabajar para obtener recursos para crear su futuro. Se trata de dignificar la cultura del esfuerzo.

Siempre se habla del carácter emprendedor del chiclanero. A pesar de ello, ¿cree que es necesario reivindicar su figura? ¿Se siente el empresariado local respaldado y reconocido por la ciudadanía?

No estamos bien mirados de manera general. Hay colectivos que nos ven con el puro y la chistera, como especuladores. Pero, detrás de cada empresario o empresaria, lo que hay es una persona trabajadora, que con su esfuerzo y arriesgando su patrimonio ha apostado por crear su propio puesto de trabajo y multiplicar ese empleo a través de las inversiones continuas. En vez de considerarnos personas dignas, se tiene esta otra mirada.

Por otra parte, se tiende a vernos como la vaca a la que ordeñar cuando faltan recursos y hay que generar impuestos. Se nos presupone una capacidad de pagar que no concuerda con el uso que hacemos de los servicios.

«Se tiende a vernos como la vaca a la que ordeñar cuando faltan recursos y hay que generar impuestos».

Un ejemplo es la tasa de la basura que estamos esperando que se cambie. La industria no hace uso del servicio de basura, pero paga cantidades desproporcionadas. Hemos abierto una mesa con Chiclana Natural para generar un nuevo escalado del impuesto, que contemple todas estas salvedades.

En estos días, la asociación está inmersa en la organización de su asamblea general ordinaria de socios, que se celebra este jueves próximo, ¿Qué esperan de ella?

Esta asamblea es un encuentro que prevén los estatutos y que se ha convertido en un punto de encuentro del empresariado chiclanero en el que, una vez que se debaten las cuentas y la memoria del ejercicio, aprovechamos para compartir preocupaciones, inquietudes, expectativas y cómo no, como cualquier empresario que se precie, intentamos vender y hacer negocio. Es lo que hoy llamamos networking. Seguro que es un éxito de convocatoria y un refrendo a la actividad de este presidente y de su junta directiva, que trabaja siempre altruistamente y con el apoyo de la Confederación de Empresas de la Provincia de Cádiz.

Por último, en líneas generales, ¿Cómo ve el futuro de la ciudad?

Ilusionante, lleno de retos y desafíos, pero con unos mimbres que nos permiten ser optimistas. El sector turístico se ha convertido en una industria que tira de gran parte de la economía chiclanera. No hay razones para pensar en que esto cambie a peor.

Chiclana ha sido en muchas ocasiones referente industrial y tenemos ahora la oportunidad de posicionarnos en la carga de trabajo naval y offshore que se anuncia en la Bahía. Eso es una buena noticia.

«Chiclana ha sido en muchas ocasiones referente industrial y tenemos ahora la oportunidad de posicionarnos en la carga de trabajo naval y offshore que se anuncia en la Bahía».

Nuestro sector agroalimentario goza de buena salud, el pescado de estero, el chicharrón, el vino. Quizás los productores necesiten un poco de más apoyo, pero la base es fuerte. Hay desafíos que compartimos con los amigos cuando estamos de tertulia y hablamos sobre qué nos falta. Allí surgen necesidades de ciudad: solucionar el diseminado sin que nos cueste dinero al resto de población, un hospital más en la ciudad, las carreteras citadas, los polígonos industriales. Y una apuesta sin prejuicios por la empresa a nivel nacional. Que se nos trate con justicia.